Una mujer australiana sigue viva, después del que el coche que conducía cayese desde la sexta planta de un aparcamiento de vehículos a la calle en Melburne, en el sureste de Australia.
Un Mitsubishi Outlander 4WD, cayó del costado izquierdo (en Australia el conductor se sienta en la derecha) y quedó atrapado entre dos edificios, lo que dificultó los trabajos para sacar a la víctima y trasladarla al hospital.
Una testigo declaró que escuchó un fuerte estruendo, como el de un accidente de tráfico, y quedó sorprendida de que un coche hubiese caído desde el aparcamiento y se encontrase atrapado en un espacio tan reducido.
Louisa Hemala añadió que la víctima estaba consciente y hablaba y, antes de que se hubiese dado cuenta, llegó una ambulancia.
Los médicos indicaron que el cinturón de seguridad y el airbag salvaron a la mujer de 41 años porque impidieron que pasase al asiento del copiloto, que es el que recibió toda la fuerza del impacto.
La Policía ha abierto una investigación para determinar la causa del accidente.
Un Mitsubishi Outlander 4WD, cayó del costado izquierdo (en Australia el conductor se sienta en la derecha) y quedó atrapado entre dos edificios, lo que dificultó los trabajos para sacar a la víctima y trasladarla al hospital.
Una testigo declaró que escuchó un fuerte estruendo, como el de un accidente de tráfico, y quedó sorprendida de que un coche hubiese caído desde el aparcamiento y se encontrase atrapado en un espacio tan reducido.
Louisa Hemala añadió que la víctima estaba consciente y hablaba y, antes de que se hubiese dado cuenta, llegó una ambulancia.
Los médicos indicaron que el cinturón de seguridad y el airbag salvaron a la mujer de 41 años porque impidieron que pasase al asiento del copiloto, que es el que recibió toda la fuerza del impacto.
La Policía ha abierto una investigación para determinar la causa del accidente.