Historia:
Se empezó a fumar narguile en los países orientales, aunque no se sabe con precisión en cual. Se cree que fue en la India, en China o en Egipto hace unos 600 años. Al principio, la base estaba hecha de coco, pero con los años ha ido evolucionando y mejorando llegando a las actuales, fabricadas de cristal y de oro o plata el cuerpo de las más lujosas.3 Sin embargo, fue bajo la colonización británica de la India cuando los británicos exportaron este invento por Occidente,4 Durante la ocupación turca del Siglo XVI en el Reino de Hungría, ésta era ampliamente utilizada por la nobleza húngara que mantenía estrechos contactos políticos con los musulmanes a través del Gran Principado de Transilvania. Una vez que en 1699 se concretó la expulsión definitiva de los turcos de los territorios húngaros, el emperador y rey de Hungría, Leopoldo I de Habsburgo, decretó la prohibición de la flauta turca, la narguila y toda clase de elemento que estuviese asociado con los musulmanes, en aras de mantener la cultura cristiana católica germánica sobre el reino
La shisha que conocemos hoy en día es producto de la evolución a lo largo de los años. Las primeras shishas son originarias de la zona de La India y Pakistán. Aquí se fabricaban las primeras shishas, artefactos rudimentarios hechos con cocos (para la base), luego pasó la idea a Persia, donde el diseño fue refinándose y perfeccionándose.
Más tarde la shisha llegó a Turquía (hace aproximadamente 500 años), donde inmediatamente se hizo muy popular entre la gente de clase alta y los intelectuales. De nuevo el diseño se mejoró y ya alcanzó el aspecto de las shishas de hoy en día que conocemos.
También cambió la forma de preparar el tabaco, inicialmente se trataba de tabaco normal sin sabores añadidos y para la hacer la experiencia más placentera la gente lo mezclaba con miel o azúcar. Posteriormente se introdujeron los tabacos con sabores de frutas con el tabaco para conseguir una amplia gama de sabores. Los más comunes eran Manzana, Cereza, Uva y Limón.
La shisha hoy en día goza de más popularidad por todo el mundo. Se la conoce con diferentes nombres en varias zonas del mundo: cachimba en España, narghile en Francia (o países de habla francesa), hookah o hubbly bubbly en Inglaterra, arguile en Líbano y shisha en la mayor parte del mundo.
Fumar shisha se ha convertido en una actividad social, un buen pretexto para que grupos de amigos e incluso desconocidos se reúnan a su alrededor para hablar de todo tipo de temas: política, religión, actualidad... o simplemente para pasar un rato juntos. Con la gran variedad de sabores de tabaco disponibles y los diferentes diseños de las shishas en sí siempre hay una fumada al gusto de cada uno.
Se empezó a fumar narguile en los países orientales, aunque no se sabe con precisión en cual. Se cree que fue en la India, en China o en Egipto hace unos 600 años. Al principio, la base estaba hecha de coco, pero con los años ha ido evolucionando y mejorando llegando a las actuales, fabricadas de cristal y de oro o plata el cuerpo de las más lujosas.3 Sin embargo, fue bajo la colonización británica de la India cuando los británicos exportaron este invento por Occidente,4 Durante la ocupación turca del Siglo XVI en el Reino de Hungría, ésta era ampliamente utilizada por la nobleza húngara que mantenía estrechos contactos políticos con los musulmanes a través del Gran Principado de Transilvania. Una vez que en 1699 se concretó la expulsión definitiva de los turcos de los territorios húngaros, el emperador y rey de Hungría, Leopoldo I de Habsburgo, decretó la prohibición de la flauta turca, la narguila y toda clase de elemento que estuviese asociado con los musulmanes, en aras de mantener la cultura cristiana católica germánica sobre el reino
La shisha que conocemos hoy en día es producto de la evolución a lo largo de los años. Las primeras shishas son originarias de la zona de La India y Pakistán. Aquí se fabricaban las primeras shishas, artefactos rudimentarios hechos con cocos (para la base), luego pasó la idea a Persia, donde el diseño fue refinándose y perfeccionándose.
Más tarde la shisha llegó a Turquía (hace aproximadamente 500 años), donde inmediatamente se hizo muy popular entre la gente de clase alta y los intelectuales. De nuevo el diseño se mejoró y ya alcanzó el aspecto de las shishas de hoy en día que conocemos.
También cambió la forma de preparar el tabaco, inicialmente se trataba de tabaco normal sin sabores añadidos y para la hacer la experiencia más placentera la gente lo mezclaba con miel o azúcar. Posteriormente se introdujeron los tabacos con sabores de frutas con el tabaco para conseguir una amplia gama de sabores. Los más comunes eran Manzana, Cereza, Uva y Limón.
La shisha hoy en día goza de más popularidad por todo el mundo. Se la conoce con diferentes nombres en varias zonas del mundo: cachimba en España, narghile en Francia (o países de habla francesa), hookah o hubbly bubbly en Inglaterra, arguile en Líbano y shisha en la mayor parte del mundo.
Fumar shisha se ha convertido en una actividad social, un buen pretexto para que grupos de amigos e incluso desconocidos se reúnan a su alrededor para hablar de todo tipo de temas: política, religión, actualidad... o simplemente para pasar un rato juntos. Con la gran variedad de sabores de tabaco disponibles y los diferentes diseños de las shishas en sí siempre hay una fumada al gusto de cada uno.